Carles Guitart - Pintor
Barcelona, 1964

Las pinturas de Carles Guitart parten de objetos y signos cotidianos habitualmente ajenas al mundo del arte, como puede ser un crucigrama o un código de barras. Son un ejemplo de la fusión de diferentes realidades en la sociedad actual, una sociedad que es una fusión de culturas, un intercambio de realidades, un mestizaje.

A menudo, sus pinturas se dividen en cuadrados o rectángulos, haciendo referencia al hábito de nuestra sociedad de fragmentar todo lo que consumimos: un capítulo de libro, un pago a plazos, horas o días como partes del tiempo, lecciones de un currículum. Tal como la vida podría resumirse como un conjunto de pequeñas realidades, o pequeñas partes de la realidad, la superficie de las pinturas de Carles Guitart se divide en partes que construyen el resultado final de la composición.

Además, su trabajo refleja una búsqueda sobre la abstracción, que permanece incluso cuando se incorporan algunas referencias figurativas en la composición general, pero tratándolas como meros signos, símbolos o elementos de una composición. Pero al mismo tiempo aún contienen referencias a la humanidad, a la vida y la muerte, la naturaleza y la sociedad, y todo ello en combinación con formas geométricas.

Otro enfoque recurrente es el contraste de la geometría en todo el plano, un fondo no planificado, con formas libres que no se basan en una proporción. Es el contraste entre lo regular y lo irregular, entre lo racional y lo irracional, entre la geometría y las formas libres. El contraste de cada concepto por separado y la tensión entre los contrarios conducen al contenido expresivo de la obra.

100 x 100 cm. Fragmentos de lienzo, pintura, lápiz y pan de oro. 2023.

50 x 50 cm. Técnica mixta sobre tela. 2021.

35 x 25 cm. Collage sobre cartón. 2020.

45 x 45 cm. Óleo sobre tela. 2016.

65 x 65 cm. Técnica mixta sobre tela. 2017.

60 x 60 cm. Óleo sobre tela. 2017.